Mucha gente tiene la creencia errónea de que “éste es mi lugar, mi sitio” cuando realmente no lo es.

Esta creencia consciente generalmente viene dada por los padres y validada por el libro de familia.

La problemática viene cuando la creencia consciente no corresponde con la realidad biológica y/o psicológica inconsciente.

Como esta creencia, esta “impronta” se genera el mismo día del nacimiento y la persona se desarrolla en torno a ella. Es decir que la integra a su estructura. Por lo tanto, se tiene que aplicar una terapéutica “estructural”, es decir una acción terapéutica inicial potente y un seguimiento terapéutico para facilitar y asegurar los cambios de hábitos.

Por otra parte, el gran desgaste psíquico y físico que produce ocupar un lugar que no le pertenece, en ningún momento aporta a la persona el conocimiento de cuál es realmente su sitio.

Su lucha diaria para defender su lugar y su posición en ningún momento contesta a su pregunta “¿por qué a mí me resulta tan difícil?”. Lo que puede derivar en problemáticas existenciales.

Por eso la terapéutica del Lugar se inicia por la identificación del Justo Sitio.

Utilizo la palabra “Justo” porque está en relación directa con la palabra clave del lugar que es la Legitimidad.

Para lograr el propósito de empoderarse en su Justo Lugar, he diseñado la siguiente terapéutica a partir de la siguiente lógica: «Es solamente cuando sé cual es mi verdadero lugar que puedo aceptar, sin estrés, adaptar mis comportamientos a las presiones de mi entorno«. Y utilizo diferentes terapias breves para ayudar a las personas para que encuentren su lugar y sepan gestionar las paradojas a las cuales su entorno les enfrenta.

Taller terapéutico “Ocupo mi Justo Sitio”

Desarrollo del taller:

1. Identificación de su Justo Sitio:

Siendo el sitio que ocupamos en la familia y el clan la resultante de la unión de las posiciones que ocupamos en cada una de las dimensiones que componen el “Territorio familiar”, la primera etapa es definir esta posición a partir de:

• El lugar según el registro civil o el libro de familia. El rango que ocupo conscientemente en la hermandad.
• El biológico, que corresponde al número de gestaciones que hubo antes de la mía para cada uno de mis progenitores.
• El arcaico, qué misión y qué papel arcaico tengo que desempeñar en función de mi rango biológico en la hermandad.
• El simbólico, los miembros de la familia me reconoce como Yo o para ellos represento a otro miembro de la familia o del clan.
• El psicoafectivo, el lugar que ocupo en el corazón de mis padres y mi hermandad.

Mediante la realización de ejercicios prácticos y del análisis dinámico del árbol genealógico se determina el “Justo Sitio”.

2. Identificación y recopilación de las paradojas:

Como una paradoja no se resuelve sino que se gestiona, se tienen que evidenciar todas las paradojas y recopilarlas para encontrar la lógica o las lógicas que permitan gestionarlas.

3. Gestión de las paradojas:

A partir de las evidencias anteriores, definir el plan de acción que permitirá ocupar su justo sitio sabiendo gestionar diariamente las paradojas existentes.

4.  Entronización en su Justo Lugar:

Acto simbólico de entronización: ¡Ocupo mi Justo Lugar!

Preparación de la comunicación dentro de la familia para que la entronización sea total.

Duración: 2½ días. (viernes tarde, sábado y domingo)

Seguimiento terapéutico – Grupos terapéuticos:

8 sesiones, al ritmo de una vez cada semana durante dos meses para:

• Redefinir sus principios fundamentales en función de su justo sitio y las paradojas que tiene que gestionar.
• Medir y consolidar los logros.
• Investigar los nuevos desafíos.
• Compartir experiencias.
• Consolidar su lugar.

Organización de las terapéuticas:

Cada trimestre organizo una terapéutica del lugar tanto para personas que sigo como otras que colegas me envían.

Los grupos suelen ser de mínimo 6 personas y máximo 10.

Para saber cuando se iniciará el próximo grupo en Madrid o Barcelona, ve a Evento y mira para cuando está previsto